Según el comandante Hossein Salami, «el equipo es capaz de detectar un caso a 100 metros de distancia en un tiempo estimado de cinco segundos»
Mientras científicos de todo el mundo trabajan contra el reloj para conseguir la vacuna contra el coronavirus y los ministerios de Sanidad hacen cola para lograr equipos para realizar pruebas rápidas, la Guardia Revolucionaria de Irán presentó un «detector inteligente» del virus que no precisa de análisis de sangre. El comandante del cuerpo paramilitar, Hossein Salami, declaró que «el equipo es capaz de detectar un caso a 100 metros de distancia en un tiempo estimado de cinco segundos». El mecanismo se ha desarrollado en Irán, el foco principal de Covid-19 en Oriente Próximo, donde ya han muerto 4.683 personas, según los datos oficiales y hay casi 75.000 infectados.
Nada más ver el aparato, medios como The Independent lo compararon con el detector de explosivos comprado por los Gobiernos de Irak y Afganistán hace unos años, que resultó ser un timo que llevó a prisión a su vendedor, el británico James McCormick, condenado a diez años de cárcel.