Las crisis política comenzada en 2018 vivió su momento más grave el pasado 7 de febrero, fecha en la que Moise denunció que la oposición, con el apoyo de jueces, tramaban un golpe de Estado.
El presidente gobernaba sin el control del poder legislativo desde el año pasado y había dicho que se mantendría en el cargo hasta el 7 de febrero de 2022, en una interpretación de la Constitución rechazada por la oposición.
La disputa sobre el final del mandato fueron consecuencia de la primera elección de Moise. En octubre de 2015 fue electo para un mandato de cinco años en comicios cuyo escrutinio fue cancelado por fraudes y luego volvió a ser elegido un año después. Tras esa última elección, las manifestaciones exigiendo su dimisión se intensificaron en el verano boreal de 2018. Ese año debían realizarse elecciones legislativas y municipales pero fueron aplazadas y generaron un vacío de poder. Moise sostenía estar habilitado para seguir en el cargo por otro año.
De forma paralela, Haití atraviesa una honda crisis de seguridad que se ha agravado, en especial desde comienzos de junio, por luchas territoriales entre las bandas armadas que se disputan el control de los barrios más pobres de Puerto Príncipe. El aumento de la violencia se responsabiliza también a facciones radicales de las propias fuerzas de seguridad. Haití también convive con la pobreza crónica y recurrentes desastres naturales.
El presidente Moise pidió en junio de 2021 el apoyo internacional y la colaboración de todos los sectores de la sociedad para acabar con la violencia.
El 5 de julio de 2021 nombró a Ariel Henry como nuevo primer ministro con la tarea de formar un Gobierno de consenso que integre a diferentes sectores de la vida política del país. El quinto nombrado por Moise debería enfrentar la grave crisis de seguridad y apoyar la organización de las elecciones presidenciales y legislativas. Sin embargo, todo cambió hoy.
Recrudece la violencia en Haití: asesinaron a un periodista y una activista frente a su residencia. El primer ministro del país caribeño calificó el ataque de “acto terrorista” y acusó a la organización “Fantom 509″
Un periodista y una activista política fueron asesinados en Haití frente a sus casas en medio de un repunte de violencia que se suma a la inestabilidad política que atraviesa el país.
Así lo informado ‘Gazette Haití’, que precisó que una de las víctimas es el periodista del mismo medio y de Radio Visión 2000 Diego Charles, mientras que la activista es Marie Antoinette Duclaire, portavoz del movimiento Matriz Liberación.
Un vídeo circula en redes sociales mostrando los cuerpos de las dos personas “bañados en sangre”, mientras las autoridades informaron que en la noche del martes en el barrio de Christ-Roi de Puerto Príncipe, cuando hombres armados dispararon desde una motocicleta. Al menos 15 personas fueron asesinadas en la zona en la misma jornada.
El primer ministro de Haití, Joseph Jouthe, emitió un comunicado en el que apuntó a que la investigación de la Policía revela que el incidente fue un “acto terrorista perpetrado por la organización ‘Fantom 509’, el comando rebelde de la Policía”.
Jouthe, que mostró sus condolencias a las víctimas, aseveró que las autoridades profundizarán en su investigación y tomarán las medidas para “reprimir estos actos terroristas, evitar su repetición y restablecer la seguridad en todo el país”.
La guerra de bandas que sacude la capital del país provocó que aproximadamente 13.600 personas huyeran de sus hogares en Puerto Príncipe desde el pasado 1 de junio, mientras que atacaron negocios, robado alimentos entre enfrenamientos con tiroteos y barricadas en algunas zonas de la ciudad.
La inestabilidad política está como telón de fondo de esta inseguridad, con un presidente, Jovenel Moise, que gobierna por decreto desde hace más de un año ante la falta de un Parlamento electo y que se ha visto obligado a readaptar su ‘hoja de ruta’ electoral para este 2021.
En Febrero 2021, el presidente Jovenel Moise, dijo que permaneceria en el cargo pese a los argumentos de la oposición que indican que su gestión finaliza este 7 de febrero y denunció un intento de asesinato en su contra. Las autoridades informaron que hubo 23 detenidos, entre ellos un magistrado y una oficial de la policía
El gobierno de Haití aseguró este domingo haber desarticulado un plan que tenía como objetivo asesinar al presidente Jovenel Moise y derribar a su gobierno en medio de las controversias sobre el fin de su mandato. Rockefeller Vincent, ministro de Justicia, sostuvo que el plan era un “intento de golpe de Estado”.
Moise denunció que una veintena de personas estaban dispuestas a “dar su vida” en la intentona golpista y ordenó al primer ministro, Joseph Jouthe, investigar todos los detalles del caso. Asimismo, instó al director general de la Policía Nacional de Haití, Léon Charles, a solicitar información sobre lo sucedido al Palacio Nacional. “Es importante que el Palacio les dé información de todo lo que se ha hecho desde noviembre hasta hoy”, indicó el mandatario en declaraciones a la prensa haitiana desde la pista del Aeropuerto Internacional Toussaint Louverture, antes de dirigirse a la ciudad de Jacmel para participar en el carnaval.
Jouthe reportó posteriormente la detención de 23 personas, incluido el juez del Tribunal de Casación, Ivickel Dabrésil, y la inspectora general de la Policía Nacional, Marie Louise Gauthier. “Hay 23 detenciones y se han incautado dinero, teléfonos y el discurso del nuevo presidente provisional”.
“Ivickel Dabrésil iba a ser el presidente provisional (…). Iban a dar un golpe de Estado. Ya tenían todas las armas. Estaban planeando instalar un gobierno hoy, según la información obtenida”, subrayó el primer ministro.
Ivickel Dabrésil, camina pensativo quizás a un encuentro con su destino.